MÁS IMÁGENES PARA EL CONCUUUUURSO

Atencioooooooooooon, Ranun me ha  enviado tres imágenes más, que están geniaal, os las dejo aquí  y ya podéis votar estas en la encuesta de: Más de Ranuuun
Si queréis ver las otras recordad que están en la entrada: Cooooooncurso
Mirad que chulaaas, un besooo

Ranun 1

Ranun 2

Ranun 3

CAPÍTULO 15: LÁGRIMAS GUARDADAS EN EL CORAZÓN

Atención!!!! Aquí llega el capítulo 15!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! Siiiiiii! Siento haber tardadoooo, no os haré esperar con el siguiente! Acordaros de votar en la encuesta!
Espero que os gustee

La cálida luz del sol entra por la ventana bañando mi cuerpo y obligándome a abrir los ojos. Alargo un brazo en busca del cuerpo de Cristopher, pero lo único que encuentra mi mano es la arisca tela de la hamaca. Me estiro desesperezándome y me pongo en pie. No le veo en la habitación, así que subo las escaleras para llegar a una pequeña terracita. Y ahí está él, apoyado sobre la barandilla observando el tranquilo mar. Me acerco por detrás y le rodeo la cintura.
-Buenos días le digo en el oído.
-Buenos días Nadia.
- ¿Tú también escuchas al mar?- le digo irónicamente.
- No, yo no soy una loca psicópata.
-Al menos yo no ronco.
-Yo no ronco.
-Venga, no mientas.
-¡No miento! ¡Yo no ronco!
-El primer paso es aceptarlo...
-¡Quéno ronco!
-Admítelo
-Va, me rindo- y me rodea con su brazo. Pasamos un rato así, con la cabeza apoyada en su hombro. Me encanta. Sin embargo recuerdo lo que Noe me contó, lo  de su padre, donde está claro que la culpable de su muerte fui yo.
-¿Por qué no me lo contastes?
-¿El qué?
-Que tu padre murió por mi culpa- ya está, ya lo he dicho. Ha sonado un poco más duro de lo que pretendía,quería haberlo dicho con más delicadeza... pero soy muy poco delicada para estas cosas. Se ha puesto serio. Su sonrisa ha desaparecido completamente y en sus ojos se puede percibir un resplandor de dolor y añoranza. Pero en seguida desaparece para dar paso al enfado.
-¿Quién te lo ha dicho?- no quiero meter a Noe en esto, no quiero darle problemas.
-Eso no importa, ¿por qué no me lo dijiste?
-No es algo de lo que guste mucho hablar        ¿sabes?- pues claro que lo se, yo también he perdido a un padre. Sin decir nada más baja y se va. Yo me quedo aquí un rato, pensando en lo ocurrido. No debería haberlo comentado. Soy una estúpida ¿Cómo he podido ser tan brusca? Al final yo también bajo con intenciones de disculparme. Está sentado en el sofá, con la cabeza entre las manos.
-Cristopher yo...
-He de confesar que al principio te odié, te odié con todas mis fuerzas. Mi padre había dado su vida por ti, abandonándome. Tenía que echarle la culpa a alguien de mi desgracia y ese alguien eras tú.
-Cristopher...
-No, escúchame- grita- Pero cuando te vi llorar en el funeral, me di cuenta de que tú no eras la culpable, sino la víctima y no me tocaba odiarte a ti, sino a los asesinos que atentaban contra tu vida, los mismos que mataron a mi padre. Y entonces me juré a mi mismo, que no dejaría que te matarán a ti ni a nadie más y que si alguien tenía que morir sería yo- acaba casi en un susurro. Está haciendo tanta fuerza con los puños que temo que se haga daño. Me siento a su lado y le abro las manos con cuidado.
-Cristopher yo... lo siento. A veces pienso que no tendría que haber nacido.
-No tienes nada que sentir, son ellos los que no tendrían que haber nacido, además, ¿qué habría hecho yo si no hubieses nacido?- eso me saca una sonrisa y me hace enrojecer.
-Tienes razón, con lo feo que eres ninguna chica querría estar contigo- me coge por la cintura y yo le rodeo el cuello- gracias- le digo en un susurro.
-Gracias a ti, por haber nacido- y así pasamos la mañana, abrazados. Y derramo mil lágrimas silenciosas, hasta entonces guardadas en mi corazón. Y se que a él también le  cae una.

A la tarde me lleva a la sede para entrenar, donde        paso horas dando golpes a muñecos hinchables y disparando a dianas. Cuando creo que ya he hecho suficiente me voy a dar un ducha. Hoy Piggi no estaba, tenía algo que hacer, vendrá mañana. Pienso en ir a ver a Noe, pero recuerdo que está estudiando para el exámen de selectividad. El exámen. Con tanta cosa se me había olvidado. Me tengo que poner a estudiar ya. ¿Cuánto queda? ¿Dos semanas? Uf, que pocas ganas de estudiar. Decido que me pondré mañana, ya que para lo que queda de día, no podré hacer mucho. Decido ir a buscar a Criskti. Pero ¿dónde? Pregunto en recepción auna mujer joven de pelo rubio.
-A saber donde está esa chiquilla- dice con tono aburrido mientras masca chicle.
-Oh, no seas así Marta- contesta una mujer más mayor- seguro que estará con los caballos- dice dirigiéndose a mi.
-Gracias.
-No hay de que muchacha.

Salgo fuera y voy hacia los establos y  como dijo esa amable mujer, Criskti se encuentra acariciando a un hermoso caballo negro.
-Hola Criskti- se gira para mirarme y sonríe.
-¡Nadia! Hola, ¿cómo estás?- sus ojos a la luz del sol producen centenas de destellos brillantes.
-Bien, me dijeron que te encontraría aquí.
-Sí, la verdad es que me paso casi toda la vida aquí, con Ceniza.
-¿Es tu caballo?
 -Sí, ¿a que es guapo?
-Sí, jaja- la verdad es, que el oscuro color del caballo contrasta con la pálida piel de Criskti y sus cabellos rubo ceniza. Parece tan frágil... y delicada.
-¿Has montado alguna vez  a caballo?
-No, bueno, una de vez de pequeña.
-Mmm, ven. Mira esta es Ángel,una buena yegua- es de color blanco y cola rubia- venga, acaríciala.
-Hola Ángel, ¿cómo estás?- digo acariciándola.
-Le gustas. Ahora sube, yo te ayudo- y con grandes esfuerzos, consigo subirme encima.
-Esto... no me tirará ¿verdad?
-Que va, es muy buena- se monta sobre Ceniza y   sale- tu tranquila, ella hace todo lo que hace Ceniza, iremos despacio- Al principio estoy nerviosa y me agarro por miedo a caer. Pero conforme vamos avanzando pierdo el miedo y gano confianza. En cierto momento, Criskti se pone a galopar y Ángel no puede hacer otra cosa que imitarla. Ahora muero, pienso, despídete del mundo Nadia. Pero eso no pasa y me descubro al final riéndome de felicidad. Acabamos cuando del sol solo queda un resquicio.
-Me lo he pasado genial, Criskti.
-Yo también, hacía tiempo que nadie me acompañaba- pobre, ha crecido aquí sola, sin familia ni amigos, sabiendo que la quieren matar por el único motivo de tener unos ojos espectaculares.
-Podrías venir un día conmigo, te presentaría a mis amigas y podríamos ir de compras, al  Starburcks y... luego podríamos ir al cine o mejor una peli en mi casa, así te podrías quedar a dormir. ¿Qué te parece?- Criskti parece que vaya a llorar de la emoción. Su sonrisa le ocupa toda la cara.
-¿De verdad?
-¡Claro que sí! Ya verás lo bien que lo pasamos.
-Oh gracias- dice mientras se lanza y me da un  abrazo- pero... ¿qué hacemos con mis ojos?
-Bah, unas gafas de sol lo arreglan todo.
-Sii, será genial, muchas gracias Nadia, haremos un    montón de cosas. Hasta hoy mi mejor amigo era Ceniza... pero hoy tengo una nueva mejor amiga- dice sin poder dejar de sonreír.Y me abraza otra vez.
 -Vendré a buscarte un día.
-Vale- dice aún ilusionada- adiós.
-Adiós- que contenta está, yo también lo estaría, debe de estar deseando salir de aquí. Salgo a la puerta de la entrada y allí me encuentro a Cristopher, junto a la moto. Por un momento, me paro, recordando la conversación de esta mañana. Espero que no este mal... pero su preciosa sonrisa aparece y me invita a seguir. Me acaricia el pelo y me da un suave beso.
-Eres una lenta ¿dónde estabas?
-Montando a caballo y creeme iba más deprisa que tu moto.
-¿Tú? ¿A caballo? Dime ¿cuántas veces te has caído?
-Pues para que sepas no me he caído ni una sola vez.
-No me lo creo.
-Pregúntaselo a Criskti, además, seguro que tú no sabes montar.
-¿La ojos brillantes?
-No la llames así.
-¿Por qué?
-A mi no me gustaría que me llamasen por la razón la cual me quieren matar y mataron a mis padres- Cristopher se queda pensativo y finalmente contesta.
-Lo que te cuesta entender es que tenéis algo especial, que la gente sea idiota, no es vuestra culpa. Pero... ¿te imaginas que te llamaran sangre anormal? Tienes razón, mejor apodos fuera.
Me deja en casa, donde disfruto de una agradable cena en familia, ha pasado casi un día desde que no les veo. Me voy a la cama pronto, estoy agotada, además mañana tendré que empezar a estudiar, buf, vaya mierda. Le doy un beso a mi madre y a mi hermana y me voy a dormir. Pero no puedo. Le echo de menos. Salgo al balcón segura de que estará ahí.
-Cristopher, ya no hace falta que te escondas- y de un salto entra.
-¿Qué? ¿Me echas de menos?
-¿Prefieres quedarte fuera?- y sonriendo se mete conmigo en la cama. Protegiéndome con sus brazos, siempre protegiéndome.

COOOOOOOOOONCURSO!!!

Hooooooooola protectoraas!!!Al final he recibido bastantes imágenes para el concursoo Bieeeeeeeeeen^^ Todas están GENIAAL, aunque he de decir que tengo mis favoritas;) Aún así quiero saber vuestra opinión y os voy a pedir que votéis por vuestra favorita, por favor no votéis en los comentarios, hacerlo en la encuesta! Y no seais cretinas, no os votéis a vosotras mismas!
Si alguien quiere enviar alguna imagen aún estáa tiempo pero que lo haga prontoo!!
Mi email: idcereza@gmail.com
Se que estoy tardando mucho con el capitulo... tengo falta de inspiración, pero mañana me pongo a escribir como una loca y lo publicaré!!
Además tengo un blog nuevo: siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!! Lo tenía un poco abandonado y no llegué a darlo a luz, pero Criskti lo ha descubierto y me ha animado a que se conozca, asi que lo he retocado un poco y listo! Aún faltán algunos detelles que ya arreglaré. Bueno, pues en este blog comento sobre todas las cosas que se me pasan por la cabeza (que no son muy normales) y muuuuuuuusica se llama:  http://mycherryworlld.blogspot.com.es/   espero que os guste y os paséis a visitarloooo
Bien, que sepáis que  aunque Spike este en mi equipo, el equipo Aphrodite es el mejor y va a ganar jaja
Os dejoo con las imágenes

Crispi 1: Tengo que felicitarte Crispi!! Tu dibujo es genial, dibujas muy bieeeeeeeen!

Criskti 1:

 

 

Criskti 2:                                                                          

 

 

Rea 1:                                                                           

 

 

Rea 2:                                                                            

                                             

PÁGINA NUEVAAAAAAAAAAAAAAAAA!!!

Como lo leéis, hay página nuevaa!! Siii! Es uno de los cambios que os dije! Es una página de fotografía, pues sí me gusta sacar fotos,  como Sheila en: Si el tiempo llega tarde;) Bueeno, hoy Lucía A. Pourtier cumple añooooooooos!!!!!!!! FELICIDADES LUCIAAAAA!! Asi que he pensado que un buen regalo sería inagurar la nueva página en su honor!! Espero que te guste Lucía!
Recordar el concurso!!! Enviarme la imagen que se os ocurra a: idcereza@gmail.com Por favoooor participar!
Ah! Y una cosa más, hay un blog  nuevo que me gusta mucho y está empezando es: http://ariamorrison.blogspot.com.es/ y va sobre una joven rica que pierde a sus padres y a su reciente marido... mola eh? Si os gusta la tragedia, no dudéis  en visitarloooooo!!!
Un besooo!!!
(Queen, que sepas que me estoy comiendo la cabeza para crear una secta, tu tranquila, que se me ocurrirá algo;))

CAPÍTULO 14: OLAS, BESOS Y OLAS

Protegidaaaaaaaaaaaaaaaaaas, ya está aquí el capítulo 14!!
Caaatoorcee, suena bien eh? Catorce! jaja Por fin llega lo que están esperando mis desesperadas lectoras..., lo deducís por el título, no? ;)
Estoy muy decepcionada, mucho, solo  he recibido imágenes para el concurso de Rea, venga, animaros y enviarme las imágenes que queráis y que identifiquen a mi historiaa, por favooor, venga, que ya tenéis lo que querías, ahora enviarme las imágenes y participar, participar, PARTICIPAAAR!!! Van a ver cambios en el blog!! Y nuevas páginas!! Así que porfavor, es importante que participéis!!
Buenoo, ya se han acabado las Olimpiadas... pero nos hemos llevado 17 medallas!!! Ya nos tienes que agradecer los hombres a las mujeres nuestro esfuerzo,que casi todas son por parte femeninaaa!!!
Luciaaa, si no hubieras insistido tanto no lo habría acabadoo, jaja lo he escrito por tii.
Queen, ahora que hay beso, me devuelves el novio??
Crispii, aver si Alan y Sheila toman ejemplo de Cristopher y Nadia ejem ejem ;)
Ya acabo, os dejo con el capítulo que es larguitoooo, y por lo que parece, es el más esperadoo jaja
Espero que os gustee^^

La brisa me da en la cara, alborotándome el pelo y obligándome a recogérmelo en un moño. Respiro la fragancia del mar y cierro los ojos, escuchándo el alboroto de las olas.
-¿Has terminado de dormir?- dice Cristopher, que ha dejado la moto al lado de una palmera.
-Ja, ja que gracioso. No duermo, escucho el mar- le contesto con superioridad.
-¿Y que te dice? ¿Que que chico más guapo te acompaña?
-No, que te de una ostia- y acto seguido le doy en el hombro.
- Que bestia que eres, seguro que esto te lo ha enseñado Piggi en el entrenamiento.
-Sí, dentro de nada podré darte una paliza como ella.
-Ni en sueños- entonces me agarra, me tira a la arena y caemos rodando por la playa. Chillo como una loca, pero no por miedo, sino de felicidad. Justo paramos en la orilla y una gran ola nos empapa a los dos.
-Ala mira, por tu culpa me voy a resfriar.
-Si claro, a finales de mayo es normal resfriarse.
-Pues sí, deberías saber que yo soy muy delicada.
-Ya ya ya... dime Nadia, ¿también eres delicada con las cosquillas?
-Yo no tengo cosquillas- mentira. Cristopher se lanza hacia mi y comienza a hacerme cosquillas, y no las puedo soportar- para, paraaa, porfavoor.
-¿Pero no decías que no tenías? Eres una mentirosa, ahora verás- y las cosquillas aumentan.
-Paraaaa.
-Pídeme perdón por mentirme.
-¡¡Nunca!!
-Muy bien- yo no paro de reír, ya no aguanto más.
-Vale, valee, lo sientooo, no más mentiras.
-¿Lo prometes?
-Lo prometo- el sonríe y me ayuda a levantarme.
-Jo, estoy llena de arena, ¡por tu culpa!
-Nadia ¿eres tú? ¡No te había reconocido!
-¡Eres idiota!- le digo en tono enfadado.
-Venga, no te enfades, era una broma, ven, vamos a agua y nos limpiamos.
-Pero si no tengo bikini, si me hubieras avisado...
-Pues en sujetador y bragas, por mi no hay problema.
-Sí ¿no te jode? ¡Y con el coño al aire también!
-Ya te he dicho que por mi...- y se ríe, pero le dura poco porque le empujo y cae a la arena.
-Bueno, pues me tendré que bañar con ropa, así también se limpia, que esta hecha un asco- miro la ropa que llevo, pensando si se estropeará. Son unos shorts vaqueros medio desechos, una camisa de tirantes rosa palo y sultecita y unas sandalias marrones. Ninguno de estos encoge así que... me quito las sandalias y me lanzo al agua como una loca posesa.
-Espera que voy- se quita la camisa y los zapatos y se mete también. Yo no paro de bucear y de saltar cuando llegan las olas, que son enormes. Una que bien puede medir un metro y pico, me lleva arrastras.Yo no puedo salir a respirar, estoy atrapada. Pero los fuertes brazos de Cristopher me agarran y me sacan de esta pesadilla.
-¿Estás bien?- he tragado agua, me entra una angustia tremenda y no puedo evitar potarle en la cara- lo tomaré como un sí.
-Lo siento.
-No pasa nada- dice limpiándose.
-Bueno, en el fondo te lo debía, por las cosquillas.
-Vale, estamos en paz- dice sonriendo. ¿Pero como me puede gustar tanto su sonrisa? Es tan bonita... Me tiene agarrada a él por la   cintura. Mi húmeda camisa debe de estar marcando mis pechos,  seguro que se esta traspasando el sujetador, pero no me atrevo a mirar, porque me he vuelto a perder en su mirada como esta mañana, justo antes de...- nos dejamos algo a medias, ¿no?- me dice, a mi solo me da tiempo a asentir, porque se lanza hacia mi, juntando sus jugosos labios con los mios. El placer   llega enseguida. Una de sus manos se mete por debajo de mis cabellos, mientras que la otra me acerca a él aún más. Las mías buscan lugares donde acariciar por todas partes: su cara, su cuello, sus brazos... Yo me estremezco y noto que él también.Cada una de mis celulas piden más y más. Pero ese más  no llega, porque una oportuna ola nos empapa y nos lleva hasta la orilla y a mi no puede  entrar otra  cosa, que la risa floja.
-Acabo de besar a una trastornada mental- dice riéndose otra vez.
-¡Oye!- le tiro a la arena, pero él me agarra y al final caemos los dos entre risas.
-Viviría  este momento, una y otra vez. No sabes el tiempo que he esperado  esto.
-Calla, que no te pega el papel de chico romántico-dramático.
-¿Y quién eres tú para ir dando papeles a la gente?   
-Soy Nadia García Fuentebuena, tu reina.
-Oh, discúlpeme majestad.
-No se si perdonar esta falta de respeto...
-Por favoor, mi reinaa- dice suplicando.
-Bueno, vale vale, te perdono-  digo vencida. Esta comenzando a atardecer y un viento helado llega y congela cada uno de mis huesos. Al notar que tiemblo, Cristopher me abraza fuerte  
- ¡Dios que frío!- digo tiritando.
-Espera, vamos a por mantas.
-¿A dónde?
-De mi casa.
-Pero para ir a tu casa y luego volver...
-¿Dónde piensas que vivo?
- No se.. tú sabrás, es tú casa.

-Anda, sígueme mi reina- me ayuda a levantarme y de la mano me lleva por la orilla, hasta llegar a un pequeño muelle de madera donde solo hay un 

pequeño barco. Al pasar por

las maderas crujen un poco y suben y bajan según llegan las olas. Cristopher levanta una de las maderas y saca unas llaves.

-Seguro que te pasabas la vida escondiendo cosas y volvías a tus padres locos.

-No te lo niego- dice sonriendo. Abre la puerta del barquito y dice -Esta, es mi casa- y es preciosa, porque por muy pequeña que sea es muy acogedora. Todo es de madera, el suelo, las paredes, los muebles... Hay flotadores y cuerdas colgadas de las paredes y fotos, muchas fotos. Hay un sofá verde, con una mesa enfrente. Algún par de sillas y una cama al fondo, junto a una mesita de noche.

-¿Ahí duermes tú?

-No, esa cama es de mi madre. Yo duermo ahí- y me señala una hamaca de tela amarilla al lado de una ventana redonda- Me la hizo mi padre cuando nací, a mi encantaba.

-¿Ya no?

-Bueno, soy tu protector, tengo que vigilarte día y noche, así que pocas veces duermo aquí, por no decir ninguna- no lo había pensado. Mientras yo duermo tan tranquila, él tiene que velar por mi durante toda la noche, ¿qué hará para no dormirse? Ni idea, yo no podría aguantar. Sintiéndome un poco culpable, le abrazo y se me saltan algunas lágrimas al recordar lo que tiene que sufrir la gente por mi.- Ey, venga, no pasa nada enserio, venga Nadia tranquila- me seca las lágrimas y me acaricia- Ya está, olvidemos esto ¿vale?

-Vale

-Venga, voy a por las mantas- abre un baúl y saca dos mantas azules. Me pasa el brazo por el hombro y salimos. Nos sentamos al borde del muelle y nos tapamos con las mantas. Las olas grandes nos salpican y nos llenan de espuma. Apoyo mi cabeza sobre su hombro mientras él me rodea con el brazo.

-¿Qué nota le pones?

-¿A qué?

-Al beso.

-Un nueve, ¿tú?

-Mmmm, un cuatro- no me lo creo ni yo. Por mi, un once.

-¡¿Un cuatro?! ¡¿En serio?! ´

- Sí.

-No puede ser... Vamos a probar otra vez- y cogiéndome desprevenida me besa aún mejor que antes, volviendo locos a mis nervios y estremeciéndome. ¡¡Pero que bien besa!!- ¿y ahora?

-Venga... un cinco.

-Va, lo haces aposta. Merezco un ocho, o más, y lo sabes.

-Ya ya... tendremos que practicar para que mejores.

-Eso me gusta.. ¿podemos empezar ahora?- ahora soy yo la que se lanza y le besa. Cuando acabo, mi estómago gruñe- te he dejado con hambre, ¿eh?  Será  mejor que prepare unos sandwiches-Y nos pasamos la tarde así. Olas besos y olas. Le hablo sobra Clara, Criskti, los entrenamientos y el palizón que le dió Piggi. Él sobre lo que es vivir en un barco, su formación para ser protector y lo que le costo sacar la licencia de pistola. Deboro los sandwiches y vemos esconderse al sol. Y al final, entre risas, acabo dormida sobre él. Me despierta para que pueda ver el cielo, que esta repleto de estrellas.

-Bueno, será mejor que te lleve ya a casa.

-Uf, pero es tan tarde... ¿no decías que hacía tiempo que no dormías en tu hamaca? Pues hay que hacer algo al respeto, es hora de que vuelvas a dormir allí.

-Tengo que estar contigo Nadia.

-No me has dejado acabar- le digo mosqueada- me quedaré contigo, le envío un mensaje a mi madre diciéndole que como se ha hecho tarde, nos quedamos en tu casa por mi seguridad y ya está- digo guiñándole el ojo. Nos metemos dentro y nos quedamos mirano la hamaca.

-¿Cabemos?

-¿Me estás llamando gorda?

-Gorda, gorda.... rellenita un poco sí que estás.

-Serás...- y le voy a dar, cuando me agarra la mano y me coge por la cintura.

-Es broma, es broma...

-Más te vale- le digo desafiante. Al final resulta, que cabemos perfectamente, bueno, yo estoy encima de él, pero eso a mi no me importa, y no veo que él se queje. Abrazada a él, poco a poco me va entrando sueño. Me siento muy segura con él. Se acerca a mi oído y provoca unas cosquillas, que me producen un gran placer en mi cuello al susurrar.

-Te quiero.

-Yo también te quiero Cristopher.

CAPÍTULO 13: UN NUEVO COMIENZO

Todo el mundo dice que el número trece trae mala suerte, pero mi abuela siempre ha dicho que da suerte. Así que a ver si es verdad;)
Vale, antes de nada quiero comentaros algunos fallos que he encontrado mientras releía la historia:
1: En el capítulo cuatro dije que Cristopher tenía el pelo castaño, me equivoqué, los tiene oscuros.
2: También dije que los ojos de Edmud un día hipnotizaron a Nadia, para aclararos, eso fue antes de conocer a Marc, cuando este se fue, ella salió con él para olvidarle, pero nunca le quiso.
3: Dije que Aurelius tenía unas gafas grandes y negras, no quería decir negras, sino redondas (sí yo tampoco entiendo que relación hay entre esas dos palabras para que me confundiera) y quizás pensarais que es ciego, pero no, tiene una muy buena vista, o todo lo que se pueda tener a su edad, pero ciego no.
Recordaros que el concurso sigue abierto y para todas las que queréis beso, que me lo habéis dejado muy claro (ejem Queen, ejem Rea) no tendréis que esperar muchoo;)
Espero que os gustee!

Paradise a las nueve. Hora puntual. La cafetería exprende un dulce olor a café y cruasanes. Paradise es una de las cafetería más prestigiosas de la ciudad. El suelo es mullido y de diferentes colores oscuros. Las paredes son de madera y en el centro hay una gran chimenea que en invierno se enciende. Ahora, casi en junio, el aire acondicionador está puesto a más no poder. Mi mesa está al lado de un cristal, a través del cual puedo ver a la gente yendo de un lado para otro. Estamos a lunes, día de trabajo. Las personas llevan elegantes trajes y maletines y nunca sin dejar de mirar el reloj, para ver si ha pasado medio minuto más. Eso es el estrés, en toda su esencia. Sin embargo también están esas  pocas personas que se lo toman con calma, bien porque se toman la vida con tranquilidad o bien porque aún no se han despegado de las sabanas, que es lo más probable.

Por fin aparece por la puerta Jessica, tan guapa como siempre.
-Llegas tarde- le digo en tono enfadado.
-Oh, perdone miss puntualidad, le he hecho esperar 5 minutos.
-Seis ¿sabes todo lo que podría haber hecho en seis minutos?
-¿Haberte arreglado el pelo? ¿Qué pasa, hoy no te has peinado?-  consigue la reacción que quería en mi y comienzo a toquetearme el pelo- Tranquila, lo tienes perfecto.
-Cachoguarra- le digo mosqueada pero enseguida me abalanzo y le doy dos besos. Entre risas nos sentamos y pedimos a la camarera.
-Yo un capuchino y una  cookie- siempre pido lo mismo, no hay nada que me guste más que un capuchino acompañado de una cookie- de las   grandes-añado.
-Sí , ya sabemos que a ti te gustan las cosas bien grandes- dice Jessica en voz baja pero lo suficiente alto para que lo escuche la camarera.
-Ah, serás…- y le pego una patada por debajo de la mesa. La camarera sonríe y le pregunta a Jessica.
-¿Y usted señorita?
- Yo un cortado y un cruasán, por favor.
-De acuerdo: un cortado con un cruasán y un capuchino con una cookie bien grande- dice guiñándome el ojo.
-Que putilla que estás hecha.
-¿Acaso he mentido?- le sonrio de oreja a oreja y le contesto:
-No- y empezamos a reírnos.
-¿Cómo fue la graduación?
-Genial, lo pasé muy bien.
-¿Algún rollo?
-No que va... pero conocí a un chico que...-pienso si es bueno hablarle de Cristopher, por eso de que es mi protector, pero al fin y acabo, no hace falta que le cuente todo...
-¿Y bien?
-Se llama Cristopher, es un chico de mi clase y cuando terminó la cena nosotros y unos amigos nos fuimos a una disco y bueno... a  Edmud, que era mi pareja... se le fue un poco la mano y Cristopher intervino para  defenderme y...
-¿Te gusta?- ¿Me gusta? Puede... Cuando estoy con él me siento muy especial. Todo desaparece. Solo existimo él y yo. ¿Y que pasa con Marc? Creo que lo he olvidado, ya no le quiero ¿si? Sí. ¡Sí! Ahora solo pienso en... Vuelvo a sonreir de oreja a oreja y le digo...
-Sí me gusta- y Jessica también sonríe. Está contenta de que me haya enamorado de otro. Sabe lo mucho que he sufrido por amor y esta noticia le hace feliz. La camarera llega y nos sirve.
-Aquí tienen, que disfruten- la conversación continua con diversos temas de no mucha importancia, acompañado de risas y pequeñas pausas para beber o comer. Pero las dos sabemos que hay una razón principal para esta reunión matutina.
-Bueno, supongo que estarás esperando a que te cuente lo que te comenté la semana pasada...
-Sí,dijiste que tenías una cosa importante que decirme.
-Cierto, de eso quería hablar contigo. No he madrugado  solo para charrar de tonterías con una chica tan fea...
-¡Eh! Para fea estás tu- y le arreo otra patada, pero aparta  la pierna justo a tiempo y mi pie se estampa contra la pata de la mesa provocándome un terrible dolor, lo que le provoca una carcajada a la que poco después, me uno yo también.
-Bueno, seriedad, deja de maltratar a la pobre mesa, que no te ha hecho nada- le lanzó una mirada asesina, pero ella prosigue como si nada- Verás la semana pasada se pasaron por la academia los representantes de una agencia muy importante de  gimnasia rítmica, que están buscando a los mejores gimnastas. Yo les hablé de ti y les enseñé algunas de tus actuaciones en vídeo. Les gustaste, y decidieron que...-coge aire y lo suelta de tirón- quieren hacerte una prueba para que entres en su agencia- me quedo muda. Primero no me lo esperaba para nada. Segundo ¿Qué pinto yo en una agencia tan importante como...?
-¿Qué agencia es?
-Gimnasia Rítmica Española.
-Dios- Pues eso ¿que pinto yo ahí?
-La prueba sería en nuestra Academia, pero las clases, en el caso que pasarás que seguro que sí, serían en otra que esta a veinte minutos en metro. Pero no creo que eso sea ningún problema. Bueno... ¿Qué opinas?
-Opino que es... es... ¡geniaal! ¡Es una noticia alucinante! ¡Que pasada! Seguro que tu les convenciste... ¡te amo Jessica! ¡Eres la mejor- he alzado un poco el tono de voz y la gente nos mira.
-Jajaja, me alegro. Pero será mejor que bajes el tono, o no echaran por tu culpa.
-Jajaja
Justo entonces entra un chico bien musculoso, que seguro que se pasa todo el día metido en el gimnasio.  Esta casi rapado al cero, tiene un pendiente y un vistoso tatuaje en el hombro. Es la cabeza de una serpiente de ojos color sangre con extraño símbolo en amarillo, una especie de eme mayúscula con una línea en vertical que la divide por la mitad. Vamos, un cani.
-Jonhatan- exclama Jessica- ¿Qué haces aquí?
-Tenía ganas de verte- Le contesta. Es la primera vez que le veo. Jessica me había hablado mucho de él, pero aún no le  conocía. Y para ser sinceros no me gusta, no me gusta para nada. Tiene algo que no me acaba... Clava su terrorífica mirada en mi, y sonríe  maliciosamente, mostrándose superior a mí - Jessica, ¿no nos presentas?
-Claro,Nadia este es Jonhatan, mi novio. Jonhatan esta es Nadia, una buena amiga.
-Encantada- le digo ofreciéndole dos besos.
-Un placer- me dice expulsándome todo su aliento en la cara, demostrando así, que fuma. Decididamente,no me cae muy bien..
-Esto se merece una foto. ¿Tienes cámara Nadia?- dice sacándome de mis pensamientos Jesssica.
-Eh... sí- la saco de mi bolso y le pido a una camarera que nos la haga. Jessica se pone en el medio y nos coge por los hombros. Es feliz de que por fin conozca a Jonhatan.
-Ya esta- dice la simpática camarera.
-¿Podría trae la cuenta?
-Claro- contesta mientras me la devuelve. De repente, unos ensordecedores pitidos estallan en la calle. Es el claxon de algún coche.
-¿A quién pitan?- dice Jessica.
-A mi- contesta Jonhtan- he aparcado mal.
-Dios.
-Iros, ya pago yo.
-Pero se suponía que tenía que invitarte yo...-contesta ella.
-¡¿Pero qué dices?! ¡Con todo lo que has hecho por mi! Anda tira, que se os lo llevará la grúa.
-Bueno vale- dice convencida viendo que no hay otra opción- pero entonces tenemos una cena pendiente, ¡y te invitaré yo!
-Vale vale, corre- me da un abrazo y me susurra:
- No pierdas el tiempo, y lánzate con Cristopher- le sonrio y se va.
-Un placer- me dice Jonhatan.
-Lo mismo digo- esta vez no nos damos dos besos y me alegro. No quiero sufrir otra vez su espantoso aliento sobre mi cara.
Miro la cuenta, vaya con la cookie, ha costado lo suyo. Pago y salgo. Estoy feliz, no solo por la gran noticia que me ha dado Jessica, si no también por lo que he descubierto: quiero a Cristopher. Ya no existe ningún Marc en mi mente, ahora solo existe él. Cristopher. Miro por la calle, sabiendo que tiene que estar cerca. Cuando por fin lo encuentro me abalanzó hacia él y le doy un abrazo, pegando mi mejilla junto a su pecho.
-¿Y esto?
-¿Qué pasa? ¿No te puedo abrazar? Pensaba que te gustaba que me agarrara a ti- le digo.
-Me encanta que te agarres a mi- y me pierdo en su sonrisa, que hoy esta más bonita que nunca, en sus ojos azules, que brillan con intensidad, en sus cabellos oscuros, que invitan a ser acariciados, y por último en sus gruesos labios, que desean ser besados. Nuestros cuerpos se juntan y nuestras caras se acercan cada vez más  y más. Cuando ya siento el calor de sus labios cerca de mi, otro pitido ensordecedor, procedente de un coche nos interrumpe. Pero esta vez no es culpa del coche de Jonhatan, sino de la moto de Cristopoher.
-Mierda- suelta. Los cláxones  continúan- Ya voy ya voy ¿no ve que estoy con una chica?- dice cabreado. Yo no puedo parar de reír, por la situación y tan bien por no llorar. Además, ver así a Cristopher,provoca que vuelva a reír cada vez que paro. El mosqueado me coge de la mano y me arrastra hasta la moto. Me da uno de sus cascos y subimos.
-¿ A dónde me llevas?
-Ya lo verás- Cuando pasamos por delante del conductor, que parece que le vaya a dar algo de lo rojo que está, yo le sonrío y le saludo, algo que le deja sorprendido, al pobre, que no entiende nada.
-Estás loca- me dice Cristopher.
-Venga, arranca pesao- le contesto entre risas. Me agarro a él y apoyando mi cabeza en su hombro derecho, de manera que mis labios rozan su cuello.
Sí, esto es un nuevo comienzo en mi vida.

CAPÍTULO 12: NO TE RINDAS NUNCA

Ya he vuelto!!!! Os he echado muuucho de menos!! Jaja Lo siento, lo siento muchísimo, he tardado un montón en colgar el siguiente capítulo, pero entre el campa, la piscina y los problemas de Internet se me ha hecho imposible… Además he tenido un atasco, pero ya lo he solucionado y los capítulos vuelven ahora sin haceros esperaar. Repito: Lo sientoooo!! Para recompensaros este capítulo es larguiiiiiiiito.

Recordaros que aún esta abierto mi primer concurso: buscar una imagen que identifique mi blog con la única norma de que aparezca el título. De momento solo ha participado Rea y he de felicitarte porque me encantan!! Mi dirección es: idcereza@gmail.com El premio es genial, pero os dejo con la intriga;)

Espero que os guste el capítuloo

Esto no solo se puede nombrar despacho, es algo mucho más.

-Adelante, pasa-me dice el doctor. Me había quedado petrificada pero sus palabras me devuelven a la realidad y entro. Todos desean pasar y descubrir el interior de esta habitación que durante tantos años se ha mantenido en secreto, pero a pesar de eso mantienen una buena distancia conmigo para dejarme privacidad. A ver ¿Por dónde empiezo? Por las paredes. Son rosas, pero no ese rosa chillón que usan las niñas pijas y mimadas, no, es una rosa claro, como el cielo en el atardecer. Están cubiertas de fotos de mi infancia. Las que más gustan son yo cubierta de chocolate y yo cubierta de helado. Sí, no era muy cuidadosa que se diga.

-Oooh, que cosa más mona- suelta Lucía- que cosita, ¡es que me la como!- intento no escucharla y sigo mi ruta por mi despacho. Bien, el suelo es amarillo claro, y está cubierta por diversas alfombras de tonos cálidos. En el centro, una gran mesa de caoba, y cuando digo gran no me refiero a una de dos metros… esta es gigante. Encima de ella a la izquierda, hay una pequeña estantería repleta de botes con bolis, algún libro y un espejito. En medio de la mesa hay un ordenador (pedazo ordenador) con impresora, fotocopiadora y mil cosas más. Finalmente sobre la derecha de la mesa hay una lámpara de madera cuya cabeza es amarilla. La silla, bueno más que silla es un sillón, es de cuero rojo oscuro. Nada más darme cuenta de que tiene ruedas, me siento encima de ella y empiezo a dar vueltas como una loca.
-Uuuuuuuuuuuuh, ¡¡Me encanta!! ¡¡Me encanta!!- cuando empiezo a marearme y siento que la comida quiere salir por donde no toca, paro y echo la cabeza hacia tras. Entonces me fijo en lo mejor, justo detrás de la mesa descubro un maravilloso jardín. Me lanzo corriendo hacia este pero para justo antes de estamparme con la puerta de cristal. Un poco avergonzada pero contenta de no haberme golpeado, la abro y salgo.
¿He dicho ya que el jardín es maravilloso? Bien pues es más que eso. Cientos de plantas flores y árboles inundan el jardín. Hay una fuente de piedra con un ángel y al fondo una pequeña cascada que acaba en un estanque lleno de nenúfares y peces. Hay banquitos de madera y bajo la sombra de un gran árbol hay un sofá-balancín. Agarrados a las ramas de los árboles más altos cuelgan columpios y en el centro de jardín, bajo una sombrilla, hay una mesa redonda con sus sillas y hamacas.

-Es perfecto- consigo decir en un susurro.

-Tu padre quiso que así fuera, y es todo para ti, solo para ti.
-Para mí…
-Doctor, fíjese- dice Lucía que ya se ha despegado de mis fotos de niña- hay una escalera que sube a…
-Por favor Lucía, deje que sea ella quien lo vaya descubriendo todo.
-Lo siento, perdona yo…
-No pasa nada. Es un poco pesada... pero muy eficiente- me dice en voz baja guiñándome un ojo.
-Créame, tengo amigas peores-los dos nos reímos y yo sigo mi ruta. En efecto, hay una escalera que sube a otra planta. Hay tres habitaciones: un baño, un cuarto con una cama y una gran sala vacía. Esta última tiene un suelo de parqué y paredes blancas. Sobre una de ellas hay un largo espejo y al final hay una pequeña caja. La abro con cuido para sacar un pañuelo doblado que guarda algo en su interior. Lo desenvuelvo y descubro el mejor regalo que podría recibir. Es una cinta, la cinta más bonita del mundo. Su palo es plateado y la cinta de color azul repleta de brillos. Atada a esta hay una nota en la que puedo leer: No te rindas nunca, papá. Con lágrimas en los ojos comienzo a moverme por las sala estrenando mi nueva cinta. La cinta brilla y resplandece a mí alrededor. Olvido todo y salgo del mundo para entrar en el mío. Es... Es mágico. Cuando creo que ya he hecho suficientes movimientos, decido parar y volver a la realidad. Envuelvo otra vez la cinta y salgo por la puerta desde donde me han visto actuar. El doctor sonriente me da una palmada en la espalda y salimos. Estoy saliendo de mi área cuando alguien me da un empujón por atrás. Es Noe.
-Mi niña ¿cómo estás? ¿Qué te parece todo esto?
-¡Noe! Pues me parece un poco raro que toda esta gente trabaje para mi protección.
-Ya verás como te acostumbras. ¿Has visto a Joel?
-Sí, no está muy mal, pero tampoco esta genial.
-Tranquila, el doctor Aurelius se las arreglará para que Joel vuelva a trabajar- dice mientras se ríe. ¿Y tu primer entrenamiento, qué tal?
-Bien, hoy he conocido a una chica se llama… Criskti, sí.
-¿La de ojos deslumbrantes? Tiene un aspecto muy delicado ¿no te parece?
-Sí, justo. Me ha caído genial, es muy agradable, la típica chica que ves y quieres ser su amiga.
-Vaya, me alegra oír eso. La pobre no ha podido relacionarse mucho... Lleva viviendo aquí desde siempre, sus…
-Padres murieron poco después de que ella naciera, me lo ha contado, como mi padre. Y alguien más también murió ¿verdad? Dime Noe ¿quién fue?
-Nadia… no se si querrás saberlo.
-Sí quiero.
-Bien, si insistes... pues fue el mejor amigo de tu padre, y no es ni más ni menos que el padre de Cristopher- no puede ser, no puede ser cierto- Cuando tu padre se ofreció ser su protector, todos le dijeron que podría ser muy peligroso, incluso mis padres. Pero el padre de Cristopher le apoyó y consiguieron convencerles. De ese modo mis padres y los suyos entraron en tu grupo de guardias. Pero la 3º organización les tendieron una trampa y el mismo día que tu padre murió también lo hizo el de Cristopher. Tu madre y la suya se hicieron como hermanas, apoyándose en los peores momentos de su vida. Cristopher y yo fuimos entrenados para ejercer el mismo trabajo que nuestros padres y él paso a ser tu protector mientras que yo entré a tu grupo de guardias. Y así hasta hoy- no tengo palabras. Hoy he descubierto algo más sobre mi pasado y habría preferido no haberlo escuchado, pero ahora lo se y para que voy a engañarme es duro. Ya hemos llegado fuera, Cristopher me espera con los cascos, al lado de la moto.
-Adiós Noe- le digo abrazándola.
-Adiós, ya te llamo- me contesta dándome un beso. Me acerco a él intentando mostrar mi mejor sonrisa.
-¿Lista para otro viaje en moto? ¿O te vas agarrarme como una lapa otra vez?
-Me agarraré solo para darte ese placer  Mister ``me ha dado una paliza una chica´´
-¡Venga ya! ¡Me he dejado ganar!
-Y también te has dejado la dignidad-le contesto divertida - Venga arranca machote- sus ojos se clavan en los míos y de sus labios surge esa sonrisa que me mata.
-Solo si te agarras a mí.
-Lo haré, ni lo dudes- y agarrada a él arranca. ¿Cómo puede ser así? Por mi culpa su padre está muerto, tendría que odiarme y sin embargo… me trata como si eso nunca hubiese pasado como… si me quisiese. Llegamos a casa y me quito el  casco. Debo de tener el pelo fatal, porque suelta una carcajada al verme y me lo arregla dándome al acabar, una caricia  que me estremece.
-No has chillado tanto a la vuelta.
-Iba agarrada a ti, no tenía a nada que temer- nos reímos y llamo a casa. Abre mi madre y en silencio me lleva a la cocina, donde hay una gran tarta de chocolate. He llegado justo a tiempo de que se despierte mi hermana.

Una niña morena baja las escaleras emocionada. Hoy es su cumpleaños y su hermana le ha prometido pasar el día con ella. Llega a la cocina y la ve. Ha cumplido su promesa. En ese momento la deliciosa tarta y los regalos pasan a un segundo plano. Se abalanza a ella segura de que será el mejor día de su vida.